Mitos de la Nueva Era
– parte I
Temas de este
artículo: La farsa de la Nueva Era. Qué motiva a las personas a creer en
teorías espirituales absurdas. ¿Funcionan realmente los rituales como la llama
violeta o la protección espiritual?
La Nueva Era utiliza símbolos y enseñanzas de las religiones ancestrales. |
La Nueva Era
La Nueva Era, que nació oficialmente en 1875 con la
fundación de la Sociedad Teosófica, no tiene nada de nueva. Los líderes de
estos cultos manipulan a sus seguidores con técnicas psicológicas infantiles y
superfluas. Lo que vemos en la llamada Nueva Era es la repetición –usando
palabras más sofisticadas y actuales- de los viejos esquemas religiosos: la
dependencia a un líder religioso, la creencia ciega en dogmas mentales y la
repetición de rituales. Esto mismo es lo que ha hecho la religión tradicional
durante milenios y no ha conducido a ninguna parte. Los que creen que la Nueva
Era tiene algo de nuevo, no han visto realmente que se trata de presentar lo
viejo en un empaque más novedoso y atractivo, pero aunque la mona se vista de
seda, mona se queda.
La necesidad de creer
Desde la antigüedad, el ser humano ha tenido una necesidad
innata de creer en algo sobrenatural. Los hombres de las cavernas desconocían
cómo funcionaba el fuego o la lluvia, así que los primeros sacerdotes –los
chamanes de su época- empezaron a crear explicaciones para estos fenómenos, de
esa manera crearon seres mitológicos y dioses que hicieran que la vida de
incertidumbre fuera más llevadera.
Esto ha pervivido en la religión moderna, pero especialmente
en las sectas religiosas de la nueva era. En ellas vemos a un líder carismático
que inventa toda clase de tonterías para un público sediento de explicaciones a
los fenómenos de la vida. Yo fui un seguidor de estos grupos desde que tenía 13
años, y fue aterrador para mí ver que casi todo en lo que creía nunca lo había
comprobado y nunca lo comprobaría. Por ejemplo, no podría comprobar nunca el
color de mis chacras, la existencia de vida en Venus, la veracidad de las vidas
pasadas reveladas por los videntes, o la existencia de la antigua Lemuria, etc.
En pocas palabras mi creencia se basaba en la fe ciega, en aceptar algo
únicamente porque alguien más –a quien consideraba una autoridad- lo decía. En
el fondo de este hay una necesidad imperiosa creer en algo.
Muchos objetarán que sí han visto el color de sus chacras o
han sentido –incluso observado- la presencia de los seres espirituales de los
que se habla. Pues bien, las experiencias espirituales se presentan en todas
las iglesias y sectas religiosas. Católicos, protestantes, Testigos de Jehová,
hindúes, etc. aseguran haber visto, sentido –incluso tocado- aquello que es
predicado por sus líderes religiosas. Este fenómeno de la mente se llama
condicionamiento, una mente que ha sido programada y condicionada, puede crear
su propio realidad por medio de la sugestión y la auto hipnosis. No estoy
diciendo que todas las experiencias espirituales sean falsas, pero si vamos a
ser serios en esto, debemos tener en cuenta el factor “mente” y su poderosa
influencia. La mente ve lo que quiere ver, y esto es un fenómeno innegable para
los investigadores serios.
Otro punto que objetaran los creyentes, es el cambio que han
experimentado en sus vidas por medio de la práctica de la religión. Pues bien,
he visto a cristianos y Testigos de Jehová demostrar también cambios tangibles
en la forma de ver la vida y en su comportamiento. El cambio es algo que
siempre se da, a medida que se aceptan ciertas reglas y normas de
comportamiento a las cuales la persona se termina amoldando: algunas veces por
devoción y otras por miedo a un castigo. De cualquier forma, muchas veces estos
cambios en el comportamiento son simple represión. Sin embargo, es importante
reconocer que algunas experiencias místicas pueden hacer que las personas hagan
un cambio radical en sus vidas por medio de un “insight”, es decir, una
revelación interna de una verdad.
Invocaciones de
protección
Una de las razones por la que uno cree en un sistema de
creencias es porque sus rituales funcionan en la vida de uno, o al menos eso es
lo que pensamos. La secta a la que pertenecía manejaba rituales para todo, pero
eran especialmente conocidos los que ofrecían protección, liberación y
transmutación.
Los rituales de protección se basaban en la invocación del
Arcángel Miguel. Bien, el punto es que yo nunca fallaba en mis oraciones
diarias de protección. ¿De qué me protegía? De posibles accidentes y de ciertos
espíritus inmundos que “acechaban a los hijos de Dios para desviarlos del
camino”. Practicando estas oraciones tuve algunos accidentes durante esos años,
uno de ellos fue grave y sucedió después de hacer un rosario completo de
protección. Por otro lado yo sentía que los espíritus inmundos (o lo que creía
que eran esos espíritus) me acechaban a veces e incluso se aparecían en sueños,
cosa que le sucedía a la mayoría de los seguidores de la secta.
Pues bien, en algún punto hace casi dos años comprendí que
el Arcángel Miguel estaba dentro de mí, que era mi propio Ser y dejé de
invocarlo al entender el Él y yo éramos Uno. La invocación a un ser espiritual
externo a uno es necesaria cuando nos sentimos separados de Dios, pero al
descubrir que nuestro Ser es Dios, la necesidad de invocar a estos seres cesa
de forma natural. ¿Qué ha pasado desde entonces? En ese tiempo no he tenido un
solo accidente, ni siquiera leve. No digo que esté exento de accidentes, pero
hace más de un año hubiera temido salir a la calle sin hacer las invocaciones
de protección creyendo que algo malo sucedería, por lo tanto, había creado una
dependencia al ritual.
En algún momento también entendí que los espíritus inmundos
eran la proyección de mis propios deseos inconscientes reprimidos, por lo tanto
dejé de temerles. Desde entonces jamás
ningún espíritu inmundo, o algo que se le parezca, ha perturbado mi paz o ha
aparecido en sueños. Es muy posible que invocar a un ser espiritual por miedo a
que pueda pasar algo malo, sea la fórmula perfecta para atraer cosas malas a tu
vida. Una cosa fundamental que descubrí es que los fantasmas o espíritus
malignos solamente pueden asustarte si crees en ellos. ¿No es eso sospechoso?
¿Alguna vez has pensado en los millones de personas que
nunca invocan protección y no les sucede nada? Lo que hace la religión es
crearnos una necesidad basada en una mentira, un miedo implantado en el
cerebro, y luego te dan la cura, te dan el ritual para que te protejas de algo
que no existe.
En el caso de los accidentes, estos son creados por nosotros
mismos. Un accidente es un mensaje de nuestro inconsciente que nos dice que
algo anda mal dentro de nosotros, es el Universo hablándonos en la cara y
diciéndonos que debemos hacer un cambio en nuestras vidas. Ya sea que oremos o
no, si no cambiamos lo que tenemos que cambiar, el accidente llegará de todas
maneras. Así que una forma efectiva de “protegernos” es miran dentro de
nosotros, auto observarnos y descubrir qué es aquello que está haciendo que
nuestra vida funcione mal.
Llama Violeta
Las sectas y religiones son expertas en sembrar culpa y
miedo en las mentes de sus seguidores, por medio de eso te pueden controlar
fácilmente. El peso de la culpa se siente como el peso del “karma” sobre tus
hombros. La solución perfecta es la Llama Violeta, mientras más horas hagas,
más karma saldarás. ¿Cómo funciona esto? El peso de la culpa afecta tu mente y
tus emociones, pero en últimas, la culpa es un pensamiento en tu cerebro. La
Llama Violeta, al igual que la confesión del católico, lo que hace es producir
alivio psicológico, ya que crees que el ritual o la confesión te han liberado
del karma o del pecado. Es decir, lo que se hace es cambiar un pensamiento de
culpa por un pensamiento positivo de alivio.
Están interesantes tus opiniones, soy testigo de Jehová y con respeto te digo, que estás equivocado sobre nosotros no somos ritualistas,se supone que toda idea y religión se basan en algo, y estoy de acuerdo que muchas religiones no tienen base alguna de sus creencias es como dijiste promueven enseñanzas porque alguien les dijo que así es, sin base ni fundamentos, estás callendo en el mismo error opinas sobre la vida y nuestra existencia pero no tienes bases para corroborar que es verdad lo que piensas, hablas del arcángel Miguel hablas de Dios, hablas de espíritus inmundos, y el único lugar original desde hace milenios en donde se habla de estos seres es inequívocamente LA BIBLIA. Mi pregunta es por qué husan ciertas palabras o ideas de la biblia para dar un lenguaje florido a sus ideas y no toda la biblia tal cual?.
ResponderEliminarCada religión toma lo que le conviene de la biblia para adoctrinar a las masas yo diría controlar incluida la hermandad blanca y sus derivados.
Donde si te estás equivocando es sobre los testigos de Jehová nosotros tomamos el 100% de la biblia y nuestro existencialismo esta basado en ella, creemos en un creador que no está dentro de nosotros literalmente no somos él, creemos en que como creador sabe lo que hizo y por qué lo hizo y para que lo hiso, y nos explica por qué las cosas resultaroo diferentes a su propósito y nos dice como está arreglando lo que reveldes descompusieron. Está tan claro y simple en L Biblia te invito a leerla y buscar ayuda con un testigo de Jehová para que solo te oriente ya que la biblia se interpreta y se explica solita que asta un chamaco pueda entender. O vicita el sitio JW.ORG saludos