lunes, 28 de julio de 2014

La guerra contra las drogas y el Despertar de la Consciencia

“Lo que resistes persiste…” es una frase poderosa del psicoanalista Carl Gustav Jung. La Gestalt se ha apropiado de esta frase aplicándola a la psicoterapia. Según este enfoque, mientras más resistencia hagamos a un hábito negativo o problema emocional como la ansiedad o la depresión, mayor fuerza cobran. Al resistir algún tipo de emoción desagradable, creamos conflicto interno y alimentamos la fuerza contraria que deseamos destruir. Puede que lleguemos a ser muy expertos en reprimir nuestras emociones, pero tarde o temprano terminarán explotando en su búsqueda de salir a la superficie.

Los terapeutas de la Gestalt hacen que el cliente tome consciencia plena de la emoción desagradable y se dé permiso de sentirla. Cuando esto se logra, el conflicto interno cesa y la emoción empieza a perder poder. Por ejemplo, una persona que padezca de episodios de esquizofrenia, generalmente empieza a sentir gran ansiedad y rechazo cuando empiezan a aparecer los síntomas. Pero justamente la ansiedad y el rechazo hacen que los síntomas sean más fuertes y destructivos.

La pregunta es ¿se aplica esto solamente al campo de la sanación emocional? ¿O podemos llevarlo a nuestra vida personal, e incluso a la situación mundial? En lo personal, cuando nos resistimos ante una determina situación, creamos fricción y conflicto con la vida. Si le enviamos al Universo el mensaje de que estamos luchando con la vida, este nos devolverá más situaciones de lucha de regreso. Por otro lado, cuando aceptamos plenamente lo que la vida nos trae, empezamos a fluir con ella y el escenario se empieza a transformar de manera natural. Aceptar lo que la vida nos trae no significa volvernos personas conformistas o renunciar a nuestras metas. Significa que estamos en paz, y desde esa paz, muchas veces surge la creatividad para cambiar las cosas o la comprensión para dejarlas como están.

Pero podemos ir incluso más lejos y aplicar esta teoría a la situación mundial. Desde hace décadas el mundo libra una guerra contra las drogas que ha generado cientos de miles de muertes y ha requerido de miles de millones de dólares. Los países donde se desarrolla esta batalla –como Colombia y Estados Unidos- cada año presentan un incremento en el número de consumidores de drogas. Es decir, a mayor prohibición mayor número de consumidores (Lo que resistes persiste). Cada vez que capturan un capo de la droga aparecen dos más que llenan el espacio vacío, cada vez que se descubre una ruta de tráfico, se crean tres rutas nuevas. Así las cosas, esta guerra parece no tener ninguna solución, la guerra engendra guerra, y eso lo vemos más claramente los que vivimos en zonas de influencia del narcotráfico donde anualmente mueren cientos o miles de personas por causas de la guerra interna entre carteles.

Si se legalizara el consumo de drogas no habría carteles y cesarían las guerras entre ellos. Al escuchar palabras como esta muchos se horrorizan porque la primera reacción es el pensamiento de que, al legalizar la droga, el número de consumidores se multiplicarán. Eso es lo que nos ha hecho creer, pero lo más paradójico es que en todos los países donde se han legalizado las drogas el consumo se ha reducido. Una experiencia interesante es la de Portugal, donde después de diez años de legalización el número de consumidores se ha reducido a la mitad. (Ver artículo de la revista Forbes).

¿Por qué en los países donde se prohíbe la droga aumenta el consumo, mientras que se reduce en aquellos donde se legaliza? Para explicar esto podemos utilizar nuevamente la frase de Jung: “Lo que resistes persiste y lo que miras desaparece”. Si la guerra contra las drogas cesara no sólo se reduciría el consumo, sino que reduciría el número de muertes que deja la guerra entre los carteles y quedarían disponibles miles de millones de dólares en recursos que se podrían dirigir a la prevención y al tratamiento de los adictos.


La represión siempre termina dándole poder a aquello que se reprime, la historia nos ha dejado lecciones como la prohibición del consumo de alcohol en los Estados Unidos que dio origen a mafiosos como Al Capone. Pero hay muchas personas interesadas en que las drogas sigan siendo prohibidas, ya que la guerra es un gran negocio para muchas empresas. Por el momento no podemos frenar la guerra global contra las drogas, pero podemos cesar el conflicto interior, lo cual se terminará reflejando en bienestar para todo el Planeta.

Para más información:


viernes, 25 de julio de 2014

Observar sin juzgar

Nuestro principal objetivo es vivir en el presente, sin embargo, al estar envueltos en la dualidad en ocasiones nos embarga el abatimiento o el miedo. Muchas veces, la primera respuesta instintiva es huir de esos sentimientos para experimentar la paz y la dicha. Pero en la huida está la trampa que nos atrapa aún más en esas emociones.

Rechazar una emoción toxica significa entrar en conflicto con el ahora, con lo que estamos sintiendo en el presente. Por otro lado, identificarnos con dicha emoción y hundirnos en ella hace que quedemos atrapados también en la trampa de la dualidad. El camino medio, el cual no tiene nada que ver con el rechazo ni con la identificación, consiste en observar la emoción de forma imparcial. Es decir, hacernos conscientes del lugar del cuerpo donde la emoción se aloja y dedicar el presente a observar y a sentir ese punto particular. La clave es que observemos sin emitir juicios de valor ni poner etiquetas a lo que sentimos. Simplemente sabemos que es algo que está allí y lo observamos de forma ecuánime, como un observador externo.

Algo importante es que no podemos observar la emoción con el objetivo de que esta desaparezca, ya que allí habría una proyección al futuro. Se trata de observarla sin expectativas, con calma, sin esperar nada a cambio. De esa aceptación pura e inocente surge una transformación que viene desde adentro, y entonces el espacio que antes ocupaba dicha emoción es ocupado Ahora por el observador, es decir, la Consciencia pura.

En ocasiones, al hacer esto, la energía emocional se mueve, se traslada a otra parte del cuerpo. Esto es muy positivo ya que significa que la energía estancada se está movilizando dentro de nuestro espacio. Lo que haremos allí es seguir el movimiento y observar cómo va desapareciendo. Si logramos estar en paz con nuestras emociones toxicas estas se transformarán, en cambio, mientras continuemos luchando contra ellas estas seguirán ejerciendo su poder ilusorio.

Observar sin juzgar, sin esperar nada a cambio, aceptando plenamente lo que llega en el presente… ahí radica la clave de la transformación total.

jueves, 24 de julio de 2014

¿Por qué nos fascina el apocalipsis?

Los cultos apocalípticos tienen algo en común: todos creen que solamente los miembros de su grupo se salvarán mientras el resto de la humanidad arderá eternamente en el infierno. Esta creencia está alimentada del orgullo y ego que les hace creer que tienen la única verdad de la Tierra. Al mismo tiempo, creer que son los únicos que se sobrevivirán, les proporciona elevar su nivel de autoestima hasta el punto de creer que son mejores que otros.

Estoy muy interesado en el tema de los cultos apocalípticos porque formé parte de uno de ellos durante años. Al salir de allí, pude darme cuenta cuáles son las estrategias que utilizan los líderes sectarios para controlar la vida de las personas. Esto me ha servido para advertir a otros de los peligros de las sectas y darles las herramientas para que tomen decisiones basadas en una información más amplia.

Discovery Channel ha creado recientemente el documental: “Vidas secretas - Cultos apocalípticos” en el cual explora la fascinación constante del hombre por las situaciones supuestamente apocalípticas y muestra lo que sucede cuando las predicciones no se materializan. Quiero citarlo en este blog ya que permite conocer mejor el interior de las sectas y el daño psicológico que pueden llegar a producir en las vidas de sus miembros.

El citado documental explora la historia de tres sectas apocalípticas: “El templo del pueblo”, liderado por el reverendo Jim Jones; Heaven´s Gate” liderada por Marshall Applewithe y “La Iglesia Universal y Triunfante de Elizabeth Clare Prophet”. Las dos primeras terminaron en suicidios masivos, la tercera no cobró ninguna vida humana, pero muchas familias fueron arruinadas y las mentes de cientos de personas afectadas durante mucho tiempo por el control mental directo de su líder.

Te invito a ver este documental por el canal Discovery Channel en las siguientes fechas y horarios:
Miércoles 30 de julio a las 14:00 (2 de la tarde), hora de Colombia.
Sábado 2 de agosto a las 15:00 (3 de la tarde), hora de Colombia.

sábado, 12 de julio de 2014

Muchas enfermedades, una sola cura


Muchas personas se acercaban a Buda pidiéndole la cura para diferentes enfermedades del alma como la pereza, la ira, la envidia, etc. Pero a cada uno de ellos, Buda siempre les daba la misma medicina: -“Hazte consciente”, decía.

Después de haber escuchado durante muchos años esta única respuesta, su discípulo Ananda preguntó: “¿Por qué a pesar de que las personas te piden la solución a diferentes problemas tú siempre les das la misma respuesta? Es como si un médico recetara la misma fórmula para diferentes enfermedades”.

Buda lo escuchó atento, y mirándolo serenamente respondió:

“Cuando una persona duerme, sueña muchas cosas. En el sueño puede experimentar diferentes clases de problemas o soñar que tiene diferentes enfermedades. Pero aun así, para el soñante sólo existe una solución: Despertar.”

Lo que Buda nos enseña es el arte de estar Conscientes, el cual consiste en ser observadores de nuestros pensamientos, emociones, palabras y actos. Cuando NO estamos observando, nos identificamos con la mente y quedamos enredados en las garras del ego. Cuando observamos, tomamos distancia de la mente y entramos en la dimensión del observador que es la Consciencia, el Ser o como lo queramos llamar. Mientras nos identifiquemos con la mente, no importa cuan espirituales seamos, estaremos prisioneros de nuestros condicionamientos y programaciones. Sólo la Consciencia nos da la libertad total.

A continuación te invito a escuchar el siguiente audio de Jorge Handabaka García, llamado “SAKSIN EL TESTIGO, Terapia espiritual”, en el cual se profundiza en este tema:



martes, 8 de julio de 2014

¿Libre albedrío?

Pregunta: ¿Libre Albedrío? ¿Es eso verdad?  ¿Qué tan libres pueden ser mis elecciones? Le mando todo mi cariño y mi respeto.


Respuesta: Una pregunta importante que debemos hacernos es: ¿La humanidad actúa como lo hace haciendo uso de su libre albedrío? Cuando hablamos de libre albedrío, nos referimos a la capacidad de tomar decisiones siendo plenamente conscientes de estas y de sus consecuencias. Desde ese punto de vista, puede decirse que muy pocas personas tomas decisiones libres. Por ejemplo, cuando el asesino ciega de la vida otra persona, llega a ese comportamiento basado en las experiencias, condicionamientos y programaciones de que ha sido objeto. Si esta persona fue rechazada desde el mismo vientre, y al nacer se enfrentó a una serie de experiencias que marcaron su vida de una determinada manera, el acto de matar es un mero producto o resultado de todo lo que ha vivido. Puede que no estés de acuerdo con esto, pero te hago la pregunta: ¿Crees que pasaría contigo si hubieras nacido con la información genética de esa persona y hubieras vivido exactamente las mismas experiencias en los mismos contextos? ¿Hubieras actuado diferente? De ahí la premisa de que no podemos juzgar a otros a menos que nos hallamos metido en su pellejo.

Cuando vemos las historias de los asesinos en serie nos damos cuenta de que todos ellos tuvieron infancias donde fueron abusados y maltratados de forma extrema. ¿Qué pasaría con los asesinos en serie y grandes delincuentes si hubieran sido hijos deseados? ¿Qué ocurriría si hubieran crecido con ambos padres y hubiesen recibido cariño y afecto de ellos? ¿Qué ocurriría si de niños, estas personas hubieran sido escuchadas y hubieran recibido reconocimiento? Ciertamente, ellos no se hubieran convertido en asesinos.

Desde este punto de vista te puedo decir que, basado en la programación que hayas tenido por parte de la sociedad, ya tomaste previamente cada decisión, lo único que necesitas es comprenderla. Mientras las personas están dormidas en la inconciencia no podemos hablar de que son libres para decidir. Ellos actúan basados en la información que han almacenado en sus mentes, en los impulsos inconscientes que los mueven. Pero sólo una persona Despierta puede realmente actuar con absoluta libertad. Esto nos permite aprender a desarrollar comprensión y compasión hacía nuestros semejantes, y al mismo tiempo dejar de juzgarnos por los actos del pasado que consideramos dignos de culpa y vergüenza. La compasión con nosotros mismos nos lleva a entender que siempre hicimos lo único que podíamos hacer basados en nuestro condicionamiento.

¿Creó Dios el castigo?

 Cuando la mente actúa desde la inconsciencia produce resultados que se vuelven en contra suya (guerras, hambre, muerte, sufrimiento). Entonces, en un esfuerzo por protegerse de sí misma, la mente crea normas y leyes que puedan contener sus propios impulsos destructivos y caóticos. De esta manera, la existencia de leyes, jueces y cárceles es parte del juego propio de la mente. Mientras haya inconsciencia habrá cárceles y castigos que sirvan para que aquel que haya cometido el delito pueda recrear los límites impuestos por su propia mente a la conducta antisocial. Entonces, no hablaríamos de un castigo divino sino de un autocastigo, que es parte de la ilusión creada por la mente la cual termina siendo víctima de su propio invento.