Las religiones occidentales han utilizado el temor que genera el eventual fin del mundo como una estrategia para controlar a sus seguidores. Observando la historia humana vemos que de tiempoen tiempo han aparecido profecías que hablan de eventos catastróficos o del finde los tiempos, esto sucede porque cada generación cree que el suyo es el tiempo final.
Los que se apoyan en la Biblia
citan a Jesús quien dijo: “En aquel tiempo habrá guerra y rumores de guerra
(Mateo 24:6)”. Ellos aseguran que estos son los últimos tiempos ya que, al ver
los noticieros y leer los periódicos, escuchamos mucha información de guerras y
rumores de guerra. Pero ¿No han existido siempre en la historia del mundo
guerras y rumores de guerra? Y una pregunta aún más directa: ¿Tenemos hoy en
día menos guerras que hace veinte o cincuenta años? La respuesta contundente es
sí, hoy en día hay menos muertes violentas que las ocurridas en la edad media o
en la primera mitad del siglo XX.
De acuerdo a las estadísticas actualmente
existen menos conflictos internos e internacionales que los que hubo en épocas
anteriores. Por ejemplo, en Latinoamérica hace varias décadas había dictaduras
y guerras de guerrillas en muchos países, mientras que hoy en día sólo Colombia
tiene conflicto interno. Lo que esto nos muestra es que la situación hoy no es
peor que la época pasada.
De esto habla el investigador Steven
Pinker, quien publicó un libro titulado “Los mejores ángeles de nuestra
naturaleza”, en el que defiende la hipótesis de que la violencia humana ha
venido declinando con los siglos. Esta tesis será refutada por aquellos que
esperan que el fin del mundo o una catástrofe mundial ocurran pronto. Ellos no
pueden aceptar que la violencia ha disminuido ya que solamente ven lo “malo”
que ocurre en el mundo, siendo incapaces de ver las cosas positivas que suceden
al mismo tiempo. Antes rechazar esta hipótesis o aceptarla ciegamente, deberías
ver el siguiente vídeo, el cual te permitirá tomar una decisión más objetiva.
Después de ver el vídeo podemos hacernos la pregunta: ¿Por qué tenemos la impresión de que cada día la violencia está en aumento? Hay dos causas probables:
Primera: Las religiones apocalípticas
nos bombardean con la idea de que todo está empeorando para convencernos de que
el fin del mundo se acerca.
Segunda: Hoy en día, como nunca antes,
los medios de comunicación cubren las noticias violentas que ocurren en el
mundo. Eso hace que tengamos la impresión de que la violencia esté en aumento,
cuando lo que ha aumentado es la capacidad de cubrimiento de los noticieros.
Analicemos el primer punto: cada
religión o sistema de creencias nos da un paradigma, es decir, unos lentes a
través de los cuales vemos el mundo. Si tus lentes están sucios, verás
suciedad; si son oscuros, verás oscuridad, y si son trasparentes, verás con
claridad. Si tu paradigma dice que todas las cosas van mal, solamente podrás
captar eso, es decir, perderás una visión objetiva y clara de la vida.
No estoy diciendo que la Tierra
sea el mundo perfecto, pero al mismo tiempo que ocurren hechos de violencia,
también ocurren actos de amor, de servicio desinteresado, de solidaridad, etc.
Lo que ocurre es que las bombas y los disparos hacen más ruido. Pero por cada
bomba que hace estruendo y que aparece en todos los noticieros y periódicos hay
millones de actos de amor, de besos, abrazos y palabras de afecto que no se
escuchan porque son silenciosas. En este momento, millones de personas están
amando, ayudando, entregándose a otros de corazón, pero nada de eso aparecerá
en los noticieros.
Así que no estoy diciendo que hay
que ignorar la violencia, pero sí estoy diciendo que es necesaria una visión centrada
de la vida que al mismo tiempo nos permita ver también todas las cosas buenas y
maravillosas que están pasando en el mundo.
Volviendo al tema central de este
artículo: ¿Por qué muchas religiones y sectas occidentales insisten en que este
es el fin del mundo? Ya dijimos que para los líderes religiosos esto es bueno,
puesto que a través de la doctrina del miedo es más fácil controlar a las
masas. Pero ¿por qué los seguidores aceptan estas doctrinas? He aquí algunas
posibles respuestas:
·
Muchas personas han llevado vidas que ellos
mismos consideran mediocres y sin sentido. Al haber una catástrofe mundial se acabarían
muchos de sus problemas: deudas, trabajos que odian y responsabilidades con las
cuales no se quieren enfrentar. El fin del mundo sería un gran escape a todos
sus problemas.
·
Como hemos visto, la mayoría de los
seguidores de las sectas tienen una baja autoestima y una personalidad
dependiente. Saber que el mundo acabará y que ellos (los miembros de su grupo)
serán los únicos que se salvarán y repoblarán la Tierra, es algo que les
fascina, ya que eso les da sentido a sus vidas y los hace sentir muy
importantes; de esta manera contrarrestan su autoestima baja.
·
También hay un número pequeño de seguidores que
tienen una adecuada valoración de sí mismos y que simplemente aceptan la idea
de la catástrofe inminente como un dogma de fe que es necesario aceptar. Sin
embargo, no poseen gran animosidad sobre el tema.
En ambos casos, los seguidores
desean –conciente o inconscientemente- que el fin del mundo llegue pronto, ya
que eso les permitirá demostrar que tenían la razón y que personas como yo
estábamos equivocadas, y les permitirá también reforzar su autoestima sobre la
base de ser uno de los pocos elegidos de Dios que sobrevivirá a la catástrofe.
Además si se tienen deudas en el banco o problemas financieros, estos se
esfumarán inmediatamente con el advenimiento del fin de los tiempos.
En conclusión, vemos que la
violencia ha tenido un reducción dramática que empezó en el silgo XVI. No
sabemos qué sucederá en una década o en cien años, pero lo cierto es que hoy en
día hay menos muertes violentas que en cualquier otra época de la historia
humana. ¿Será el declive de la violencia un rasgo adaptativo de la especie
humana creado para sobrevivir? ¿Será un signo de que la humanidad se está
iluminando? No sabemos con certeza, pero lo que sí sabemos es que las
religiones del miedo nos ha desinformado con el fin de lograr mayor control
sobre nuestras asustadas mentes. La próxima vez que escuches a tu predicador
diciendo que la violencia en el mundo va de mal en peor, recuerda lo visto en
el vídeo y pregúntate por qué él necesita que estés tan asustado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario