La manipulación se da cuando queremos que alguien se comporte de una determinada manera y en vez de decírselo con franqueza, recurrimos a trucos psicológicos como buscar que se sienta culpable si no hace lo que queremos, u orgulloso si accede a nuestros deseos. En cualquiera de los dos casos hay una intención oculta para controlar por medio del miedo, de la culpa o del premio manipulador.
Práctica: El día de hoy pediré abiertamente lo que quiero sin recurrir a manipulaciones ocultas para que así la otra persona pueda tomar decisiones libres y voluntarias.
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